En muchos viajes a Sri Lanka, la pequeña ciudad de Nuwara Eliya es la puerta de entrada a las Tierras Altas de Sri Lanka. Una región del país que se encuentra a una altitud cercana a los 2.000 metros y donde predominan las plantaciones de té, las colinas y los saltos de agua. Esto hace que todo el entorno de este pueblo sea muy interesante, y que haya un buen número de lugares que ver en Nuwara Eliya.
Nuwara Eliya a menudo se conoce como Little England, ya que durante el período colonial británico, un buen número de ingleses se establecieron en Nuwara Eliya atraídos por su clima y paisaje similar a de Inglaterra. Por eso, en esta ciudad todavía predomina una arquitectura colonial con un mercado estilo europeo.
En esta localidad predomina un ambiente muy relajado, y merece la pena dedicar una mañana o una tarde a pasear por las calles de la ciudad y el entorno más cercano. En concreto estos son los puntos más recomendables que ver en Nuwara Eliya:
La oficina de correos de Nuwara Eliya es el edificio más emblemático de esta ciudad. Fue construido en 1894 y recuerda a los edificios ingleses. Si tienes previsto enviar alguna postal a un familiar o amigo, éste es el lugar ideal para hacerlo.
Pasear por el centro de Nuwara Eliya, siguiendo la calle principal hasta el mercado central también es una buena forma de poder observar el ambiente de esta ciudad. En el mercado se puede comprar fruta y especias. También hay algunos comercios de comida rápida, donde se puede comer o cenar por menos de dos euros.
Algo alejado del centro, hay otros dos edificios históricos y de estilo colonia: el St Andrew Hostel y el Queen’s Cottage. Cerca de allí también se encuentra el campo de golf más grande de Asia.
Realmente, esto no es lo más imprescindible que ver en Nuwara Eliya, pero si se tiene algún rato libre puede ser interesante acercarse a esta zona.
Este parque, situado en el centro de Nuwara Eliya, es un pequeño oasis de naturaleza y verdor en el interior de esta ciudad de 30.000 habitantes. Paseando por allí, se puede ver un buen número de especies de plantas, muchas de ellas floridas y vistosas. Además, es un punto muy interesante donde buscar y fotografiar aves.
Un punto bastante interesante que ver en Nuwara Eliya, y que se encuentra a sólo unos minutos del centro de la ciudad, es el Gregory Lake. Este lago artificial fue construido durante el período del gobernador británico Sir William Gregory en 1873. Es una zona ideal para pasear y donde mucha gente local se acerca a hacer picnics o fiestas durante los fines de semana. También se pueden alquilar bicicletas para dar la vuelta al lago, aunque yo creo que es mejor destinar más tiempo a conocer todo el entorno de Nuwara Eliya, mucho más tranquilo y más bucólico.
La entrada al recinto de este lago es de pago, y cuesta 1000 LKR por persona extranjera.
Para mí, lo que hace realmente interesante visitar Nuwara Eliya son todos los atractivos que hay a pocos kilómetros de esta ciudad.
En concreto, éstos son todos los atractivos que se pueden encontrar a menos de 50 kilómetros de Nuwara Eliya:
El Parque Nacional Hortel Pains es uno de los pocos parques nacionales de Sri Lanka donde se pueden hacer excursiones a pie, en lugar de safaris en 4×4 (como el safari en el Parque Nacional Wilpattu o el safari para ver elefantes en Kaudulla).
Este parque nacional se encuentra a una altitud de entre 2.100 y 2.300 metros, y esto hace que haya bastantes especies endémicas, especialmente de flora. En cuanto a los mamíferos, lo habitual es poder ver algún ejemplar de ciervo sambar, que están bastante acostumbrados a ver personas y no suelen huir. Asimismo, es importante mantener una distancia prudencial con ellos (unos cuatro o cinco metros). También hay leopardos en este parque nacional, pero durante el día es prácticamente imposible verlos.
A la hora de visitar esta zona, que se encuentra a poco más de una hora en coche de Nuwara Eliya, hay que tener presente que este parque nacional tiene un microclima muy particular, que hace que alrededor de las diez de la mañana, muchas veces todo el paisaje quede cubierto por una espesa niebla. Por eso, es básico llegar en breve al parque (es recomendable salir de Nuwara Eliya alrededor de las cinco de la mañana).
Una vez allí, se puede realizar una ruta circular a pie de unos 9 kilómetros. Este camino pasa por los puntos más destacados: el acantilado mini Wolrd’s End (con una caída de 270 metros), el acantilado World’s End (tiene un cauce de 870 metros) y el la cascada Baker’s (un salto de agua de unos 20 metros de altura).
Este parque se puede conocer por libre, pero hay que pagar una entrada de 25$ por adulto extranjero.
La mejor opción para llegar a este parque nacional desde Nuwara Eliya es con un conductor privado. Es fácil reservarlo desde el alojamiento, desde la estación de tren o en el centro de la ciudad.
Por lo general, un precio razonable a pagar por ir y volver serían unos 4.500 LKR.
El té es uno de los grandes protagonistas de las Tierras Altas de Sri Lanka y del entorno de Nuwara Eliya. Por eso, una actividad bastante habitual durante un viaje a Sri Lanka es la de visitar alguna fábrica de té, para conocer todo el proceso que se sigue desde la recolección de las hojas hasta la venta del producto final.
Entre las fábricas de té que ver en Nuwara Eliya, la de Mackwoods es una de las más emblemáticas. Se encuentra a unos 30 minutos en coche de la ciudad, y todo el trayecto es muy escénico. Además, muchas veces (sobre todo por la mañana) se pueden ver las famosas tea puckers mientras recogen las hojas de té.
La visita dura unos 15 minutos y es gratuita (incluye una degustación de té), aunque después esperan que acabes comprando alguna bolsa de té en la tienda donde finaliza el recorrido. Cada bolsa de té cuesta unos 7.000 LKR, bastante más caro que si se compra en algún mercado.
No muy lejos de la fábrica de té anterior se puede visitar una de las cataratas más bonitas de las Tierras Altas: la Ramboda Falls. Este salto de agua tiene una caída de unos 109 metros y el acceso es por un camino con bastantes escalones, y que se completa en unos quince o veinte minutos.
Dado que el acceso es privado, actualmente es necesario pagar 1.000 LKR por persona para poder acceder al camino y acercarse a la cascada.
Cerca de la entrada del camino que va hasta la cascada se encuentra el Ramboda Falls Hotel. Merece la pena entrar porque las vistas desde los jardines y el comedor son espectaculares. Se puede caminar hasta otra cascada bastante alta, y también contemplar un valle verde y con varios saltos de agua lejanos. Además, también se puede almorzar allí (hay un buffet que cuesta 1.500 LKR por persona). La comida no es espectacular, pero el entorno sí.
También hay algún otro mirador y cascada cerca de esta zona, la mayoría de los conductores los conocen, así que vale la pena pedir hacer las paradas en todos los miradores de la zona antes de regresar a Nuwara Eliya.
Para el trayecto en coche con conductor desde Nuwara Eliya hasta aquí (ir y volver), se puede esperar pagar unos 3.500 LKR.
Otra fábrica de té que ver en Nuwara Eliya es la Pedro Tea Factory (está bastante cerca de la ciudad). Allí también realizan visitas guiadas para explicar el proceso de fabricación del té. Es una visita bastante similar a la que se puede realizar en la fábrica de Te Mackwoods o en las fábricas de té de Kandy. Por eso, yo recomiendo hacer sólo una visita de este estilo.
Cerca de esta fábrica también es habitual ver trabajar a las tea puckers por los campos cercanos. Normalmente durante la mañana, cuando todavía no hace tanto calor, es más fácil verlas.
El monte Pidurutalagala con 2.524 metros de altura es el más alto de Sri Lanka y es fácilmente accesible desde Nuwara Eliya. Se puede subir en vehículo (coche o tuk-tuk) y basta con hacer los últimos cien metros a pie.
Realmente, las vistas desde arriba no son impresionantes, así que sólo recomiendo esta visita si se tiene tiempo de sobra.
La cascada de St. Clairs es una de las más bonitas y fotogénicas de la región de Nuwara Eliya. Está ubicada entre plantaciones de té y se puede ver desde varios miradores a lo largo de la carretera que conecta Nuwara Eliya con Hatton. El mejor momento para visitarla es durante la época de lluvias, cuando desciende con más fuerza.
Aunque es posible acercarse un poco más caminando, la mayoría de los viajeros lo observan desde la distancia, ya que no hay un acceso fácil hasta la base de la cascada. Sin embargo, la combinación del agua cayendo, el verde intenso de las plantaciones y el paisaje montañoso hacen que sea una parada muy recomendable si se recorre esta zona de las Tierras Altas.
🤞 Seguro de viaje para Sri Lanka
Ante cualquier imprevisto, disponer de un buen seguro de viajes es básico para evitar grandes quebraderos de cabeza. Yo siempre viajo asegurado con Heymondo. Si contratas su seguro de viaje a través de este enlace tendrás un 5% de descuento al ser lector de Viajar es Descubrir.
Si quieres profundizar sobre los motivos por los que recomiendo Heymondo, puedes leer el post Heymondo: seguro de viaje (detalles, coberturas y precios).
Desde mi punto de vista, la mejor manera de llegar a Nuwara Eliya es en tren, haciendo una de las rutas más escénicas del país. En concreto, Nuwara Eliya se encuentra a medio camino de la ruta en tren que une Kandy con Ella, atravesando las tierras altas. En cualquiera de las dos direcciones, el trayecto hasta Nuwara Eliya (hay que bajar a la estación Nanu Oya) dura unas tres horas y media.
ℹ️ Más información: La ruta en tren más famosa de Sri Lanka
Alternativamente, también se puede llegar a Nuwara Eliya en bus (hay rutas desde Colombo, Kandy y otras ciudades) o también en taxi.
También hay gente que decide recorrer Sri Lanka alquilando un tuk-tuk o coche. En ese caso, también se puede llegar a Nuwara Eliya fácilmente.
Nuwara Eliya tiene un clima fresco y húmedo que contrasta mucho con el calor tropical del resto de Sri Lanka. Situada a más de 1.800 metros de altitud, las temperaturas oscilan entre los 10 °C y los 20 °C durante todo el año, con noches especialmente frías entre diciembre y febrero. Es habitual despertarse con niebla, cielos nubosos y una atmósfera que recuerda mucho a la de un pueblo de montaña europeo.
Aunque llueve con más frecuencia entre octubre y diciembre, las precipitaciones se reparten durante todo el año y mantienen el paisaje siempre verde. Para disfrutar al máximo de la zona, es necesario llevar ropa de abrigo, alguna prenda impermeable y calzado cómodo.
En Nuwara Eliya hay un buen número de alojamientos, tanto en la parte céntrica de la ciudad como a lo largo de las pequeñas colinas que la rodean. Realmente, si se busca tranquilidad, es recomendable buscar alguna de las opciones que se encuentran en las afueras de la ciudad.
Nosotros dormimos en el Misty Hills Boutque Cottage B&B, un alojamiento que ya no existe.
Actualmente, yo recomiendo alguna de estas opciones:
Cuando llegamos a la estación de tren de Nanu Oya, a pocos kilómetros de Nuwara Eliya, un conductor se acercó rápidamente a nosotros para ofrecernos el trayecto hasta el hotel. Nos pareció bien el precio (1.000 LKR), así que fuimos con él. Nos acompaño hasta nuestro alojamiento y aprovechamos para pactar también los trayectos que queríamos hacer esa misma tarde y al día siguiente: visitar el centro de la ciudad, el lago Gregory y, al día siguiente, subir hasta el Parque Nacional Horton Plains y después visitar las Ramboda Falls.
Una vez llegamos al Misty Hills Boutique Cottage B&B, dejamos las mochilas y almorzamos tranquilamente. Nos gustó el ambiente de montaña que se respira en la zona, con un aire mucho más fresco y un entorno más verde que otras partes de Sri Lanka. Después de un rato de descanso, a las 16:30 nos encontramos con el conductor y empezamos a conocer los puntos que ver en Nuwara Eliya más cercanos a la ciudad.
La primera parada de la tarde fue el Gregory Lake, uno de los puntos más conocidos de Nuwara Eliya. Nos acercamos en coche y hicimos un paseo por la orilla. El lago tiene un cierto encanto, pero había bastante ruido y bastante gente, ya que es un espacio popular entre las familias locales para pasar la tarde.
Después del lago, el conductor nos dejó en la calle principal de Nuwara Eliya, desde donde dimos un paseo hasta el mercado. El centro de la ciudad es bastante sencillo, con comercios locales, alguna cafetería y bastante movimiento. El mercado siempre está activo y animado, aunque no es especialmente atractivo si se compara con otros mercados del país. Es una parte muy local, pero no la consideraríamos un imprescindible que ver en Nuwara Eliya si tienes poco tiempo.
Seguimos caminando por el centro hasta llegar al edificio más emblemático de la ciudad: la antigua oficina de correos. Es una construcción de estilo británico, de ladrillo rojo, que destaca en medio de los edificios más sencillos de la ciudad.
Acabamos la ruta de la tarde paseando entre las casas coloniales de las afueras de la ciudad, donde hay algunas casas señoriales y hoteles con estética totalmente inglesa. Es curioso ver cómo se ha conservado este estilo arquitectónico en una ciudad de montaña de Sri Lanka. Muchas de las mansiones tienen jardines bien cuidados y rodean calles tranquilas.
También pasamos junto al Nuwara Eliya Golf Club, uno de los más antiguos y grandes de Asia. Todo ello crea un ambiente muy diferente al que hemos vivido hasta ahora en el país.
Con esto dimos por terminado el día y volvimos en coche al alojamiento, para cenar allí e irnos a dormir bien temprano. Al día siguiente teníamos que madrugar mucho…
Empezamos el día bien temprano para disfrutar de uno de los paisajes más icónicos de las tierras altas de Sri Lanka. Nos levantamos a las 4:30 de la mañana, y bien abrigados empezamos el trayecto en coche hacia el Parque Nacional Horton Plains. Por todos los trayectos en coche del día (ir primero a Horton Plains y después a la zona de la Ramboda Falls) acordamos con el conductor un precio de 8000 LKR.
Llegamos a la entrada del parque sobre las 6:30. Sin embargo, hay que seguir un buen rato en coche hasta el parking desde donde empieza la caminata. Durante este último tramo ya empezamos a ver vida salvaje: varios sambar deers pastan tranquilamente cerca de la carretera. Uno de ellos, justo al lado del parking, se dejó ver de cerca mientras comía hierba, sin asustarse por nuestra presencia.
Hicimos la ruta circular de 9 km, la excursión más popular del parque. Tuvimos bastante suerte con el clima: el cielo estuvo completamente azul y sin nada de niebla. La caminata es muy asequible, con poco desnivel y llena de paisajes espectaculares. Con calma, tardamos unas tres horas y media en completar el recorrido.
Después de la excursión, deshicimos el camino hacia Nuwara Eliya y continuamos en coche dirección sur por la carretera que lleva a Ramboda Falls. Es una carretera llena de curvas, bastante lenta, pero espectacularmente bonita. Los campos de té, de un verde intenso, lo cubren todo como una alfombra. De vez en cuando, a lo lejos, se pueden ver los trajes de colores de las tea puckers trabajando entre las plantaciones, como hormigas organizadas.
Unos kilómetros más adelante, nos encontramos con un grupo de tea puckers muy cerca de la carretera, que pudimos fotografiar mientras trabajan a gran velocidad.
Desde allí, solo tardamos unos cinco minutos en coche hasta tener la primera vista de la cascada Ramboda.
Llegamos a la entrada de Ramboda Falls e hicimos el camino de subida de 15 minutos hasta el mirador de la parte superior. El camino, que discurre junto al río, es básicamente una subida por escaleras, pero no es muy duro. Una vez arriba, las vistas son fantásticas: la cascada cae con fuerza en medio de un entorno verde intenso. Es un rincón muy bonito y tranquilo.
Después de la visita, fuimos a comer en el Ramboda Falls Hotel, un restaurante situado en un lugar privilegiado con vistas a otro salto de agua. Antes de ir a comer, caminamos cinco minutos para visitar la cascada que se encuentra en el terreno del hotel. Luego ya fuimos a comer. El buffet está bien, pero al día siguiente tuvimos una pequeña intoxicación alimentaria, que sospechamos que creemos que fue por algún postre con gelatina durante esta comida.
Cuando acabamos de comer, y después de pasear un poco más por los jardines del hotel, volvimos al coche y fuimos hasta una nueva cascada y un último mirador. Es realmente asombrosa la cantidad de saltos de agua de esta zona de las tierras altas de Sri Lanka.
Después de un día intenso y lleno de paisajes preciosos, volvimos hacia Nuwara Eliya, donde llegamos a media tarde. Durante el regreso habríamos podido parar en la fábrica de té Mackwoods, pero decidimos saltarnos la visita porque hacía sólo dos días que habíamos visitado la fábrica de té en Kandy.
Durante el resto de la tarde nos quedamos en el alojamiento, descansando y disfrutando del fresco y las vistas desde el balcón. El día ha había sido largo pero maravilloso. Un día completo descubriendo que ver a Nuwara Eliya y en las tierras altas de Sri Lanka.
Para terminar este post, nada mejor que un resumen visual de todos los sitios interesantes que ver en Nuwara Eliya:
(Este post corresponde al día ocho (tarde) y nueve del viaje a Sri Lanka)
Organiza tu viaje a Sri Lanka
✈️ Las mejores ofertas de vuelos a Sri Lanka aquí.
🏨 Los mejores precios de alojamientos en Sri Lanka aquí.
🚑 Contrata tu seguro de viaje con un 5 % de descuento aquí.
💳 La mejor tarjeta para pagar (sin comisiones) y sacar dinero en el extranjero aquí.
💵 La mejor forma de hacer transferencias al extranjero aquí.
Acabo de llegar a Canadá y de activar mi Working Holiday Visa, y una de…
Galápagos tienen fama de ser un destino caro, sobre todo si se viaja con agencia…
El Cerro Tronador, situado dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi, es uno de los atractivos más escénicos…
Ver comentarios
Hola!
Me está resultando muy interesante y detallado tu blog. A partir del día 8 por la tarde y día 9, no me deja continuar leyendo y quiero seguir informándome porque estoy preparando mi viaje y me gusta mucho cómo lo habéis organizado, ¿es posible seguir leyendo?
¡Hola Alba!
Gracias por pasarte por el blog y el comentario. Me alegra que te esté resultando útil la información para preparar tu viaje a Sri Lanka :)
No he terminado de escribir la descripción completa de los otros días, por eso no lo puedes ver todavía, no está publicado.
De todos modos, en el post de genérico del viaje de 20 días, supongo que lo habrás visto, puedes ver un resumen de cada día, así que el itinerario que seguimos lo puedes ver allí. Igualmente, si tienes alguna duda, dímelo y puedo enviarte información adicional.
Espero acabar de publicar los días que faltan próximamente, pero si vas a Sri Lanka este verano creo que todavía no habré terminado de escribirlo todo.
Un saludo
Arnau