Ver chimpancés en libertad es una experiencia inolvidable para cualquier amante de la naturaleza. Estos primates se encuentran distribuidos por un gran número de países africanos, que van desde Senegal, al oeste, hasta Tanzania, al este. Sin embargo, en la mayoría de zonas es realmente complicado ver chimpancés. Durante los últimos años, el Parque Nacional Kibale, en Uganda, se ha convertido en uno de los mejores lugares del mundo para ver chimpancés salvajes.
El Parque Nacional Kibale protege un bosque selvático de unos 770 km2. La densa vegetación que cubre este territorio hace que orientarse y observar fauna sea un desafío. Dentro del Parque Nacional Kibale viven más de 1.200 chimpancés. Y aunque son los animales más emblemáticos del parque, existen muchas más especies dentro de este bosque: se han registrado hasta 13 especies de primates, 300 especies de pájaros y otros mamíferos como el elefante, el búfalo o el leopardo.
Para ver chimpancés en el Parque Nacional Kibale de forma responsable y segura, es necesario reservar un permiso para realizar la actividad de rastreo.
¿En qué consiste el rastreo de chimpancés en el Parque Nacional Kibale?
La actividad estrella del Parque Nacional Kibale consiste en intentar ver un grupo de chimpancés salvajes. Son animales libres, así que verlos jamás está asegurado. Sin embargo, las probabilidades de poder observarlos son muy altas: sólo se visitan grupos que han sido acostumbrados a la presencia humana y que están en constante seguimiento .
Resumidamente, los pasos de la actividad de rastreo de chimpancés o chimpanzee trekking son los siguientes:
– A la hora de inicio de la actividad (a las 8:00 o a las 15:00), hay que dirigirse al punto de encuentro del parque nacional. Después de una verificación de permisos y pasaporte, cada viajero es asignado a un grupo y ranger.
– Seguidamente, se hace una introducción sobre la actividad y el grupo de chimpancés que se visitará.
– Según la posición de los chimpancés, se empieza a realizar el rastreo saliendo desde las oficinas del parque o bien se realiza una aproximación en coche.
– Entonces comienza el momento de buscar a los chimpancés. El ranger es el encargado de ir definiendo el camino (muchas veces bosque a través) a partir de los sonidos y rastros de los chimpancés. El ranger va armado, especialmente para asustar a los elefantes y búfalos en caso de un encuentro con ellos.
– Una vez que se encuentra el primer individuo, está permitido pasar una hora con ellos.
– Cuando han pasado 60 minutos es el momento de regresar hasta el punto de inicio del parque.
– Por lo general, la duración total de la actividad varía entre dos y cuatro horas. Depende del tiempo que se tarde en encontrar a los primates.
¿Cuántas personas pueden hacer el trekking de chimpancés?
El número de personas que diariamente pueden hacer el trekking de chimpancés está limitado. En concreto, en cada grupo puede haber un máximo de diez personas .
Aunque se realizan dos salidas diarias y hay diferentes grupos, a menudo se venden todos los permisos. Sobre todo en temporada alta. Por eso, es casi imprescindible reservar el permiso con antelación.
¿Cómo reservar el trekking para ver chimpancés en el Parque Nacional Kibale?
Si se hace un viaje a Uganda a través de una agencia (extranjera o local) no es necesario preocuparse por ello. Ellos se encargarán de realizar todos los trámites.
En caso de viajar al país por libre, hay dos formas de solicitar este permiso :
– Directamente a través de Ugandan Wildlfe Authority (UWA). Se puede contactar con ellos por correo electrónico y realizar el pago por transferencia bancaria. No es demasiado recomendable hacerlo así. Son muy lentos contestando, y realizar la transferencia internacional implica pagar más comisiones.
– A través de una agencia local o el alojamiento. Si viajas a Uganda en coche de alquiler, posiblemente el personal de la agencia de coches te pueda ayudar a realizar este trámite (a cambio de alguna comisión). También se puede solicitar este servicio en alguna agencia local del país o en algún alojamiento de confianza.
El coste de este permiso es de 200 USD.
¿En qué consiste la habituation experience en el Parque Nacional Kibale?
Si se quiere vivir una experiencia más inmersiva y larga con los chimpancés, se puede contratar la habituation experience. En este caso, el tiempo permitido para pasar con los chimpancés es de cuatro horas.
Aparte de la duración, la diferencia principal de esta actividad es que se visita un grupo de chimpancés que todavía están en proceso de habituación a los humanos. Un proceso que suele durar hasta tres años. Por tanto, esto puede hacer más difícil verlos de cerca. También implica tener que andar mucho más, ya que a medida que los chimpancés se van moviendo, es necesario ir buscando a otros miembros del grupo.
Es una actividad única, ideal para aprender sobre el comportamiento de los chimpancés. Para poder verlos con cierta proximidad es necesario ser paciente y ganarse su confianza.
El precio es algo mayor: 250 USD. Hay muchos menos permisos para realizar esta actividad, así que es aún más importante reservarla con la máxima antelación posible.
¿Cuál es la mejor época para ver chimpancés en el Parque Nacional Kibale?
Se pueden ver chimpancés en el Parque Nacional Kibale durante todo el año. Sin embargo, es más recomendable realizar esta actividad durante la estación seca, es decir, de junio a septiembre o de enero a febrero. Cuando llueve la mayoría de chimpancés suelen quedarse en las copas de los árboles, y es más complicado observarlos.
La ventaja de la época de lluvias es que suele haber menos gente y los precios de los alojamientos son mas bajos. Además, el paisaje se encuentra en su mejor momento.
Otras zonas donde ver chimpancés en Uganda
El Parque Nacional Kibale no es la única zona donde se pueden ver chimpancés dentro de Uganda. Sin embargo, sí es la zona con mayor densidad de estos primates y donde las observaciones suelen ser más exitosas.
Los otros bosques donde se pueden ver chimpancés en Uganda son:
– Budongo Forest, en el Parque Nacional Murchison Falls. Precio: 100 USD.
– Kyamburu Gorge, en el Parque Nacional Queen Elizabeth. Precio: 50 USD.
– Kalinzu Forest Reserve: 50 USD.
– Ngamba Island. 73 USD.
Consejos para ver chimpancés en el Parque Nacional Kibale
Ver chimpancés en libertad implica estar en un entorno con animales salvajes, con los peligros que ello conlleva. Para evitar cualquier complicación o situación imprevista, es importante seguir estos consejos:
– Seguir siempre las órdenes del ranger-guía, y no separarse de él durante la ruta por el bosque de Kibale.
– No participar en el trekking de chimpancés ni en la habituation experience en caso de estar enfermo. Los chimpancés podrían contagiarse. Además, durante la observación es necesario llevar mascarilla.
– No echar desperdicios.
– Hablar en voz baja y no realizar movimientos bruscos.
– Mantener una distancia de ocho metros con los chimpancés. Si alguno de ellos se aproxima a ti, entonces es mejor estar quieto.
– No imitar los sonidos de los chimpancés.
– No tomar fotos con flash.
– No beber ni comer cerca de los chimpancés.
– No interaccionar con ellos ni tocarlos.
– Hay mucha vegetación e insectos. Para evitar picaduras o reacciones alérgicas es mucho mejor llevar ropa de manga larga y algún gorro o sombrero.
– Llevar calcetines largos y colocarlos por encima del pantalón. Así se evita que los insectos puedan picarte en las piernas.
– Ir equipado con un buen calzado. Si puede ser, botas de andar de caña alta.
– Llevar un impermeable por si llueve durante la salida.
– En los bosques húmedos suele haber bastantes mosquitos, por eso se aconseja aplicarse repelente de mosquitos antes de empezar la ruta.
– Llevar agua en abundancia (mínimo un litro y medio).
Dónde dormir en el Parque Nacional Kibale
El Parque Nacional Kibale es uno de los sitios más turísticos de Uganda. Cerca del parque hay una amplia oferta de alojamientos. Con opciones para todos los presupuestos.
Algunas de las opciones mejor valoradas son:
– Kibale Forest Camp. Se encuentra a unos quince minutos del punto de inicio del trekking para ver chimpancés. Aquí es donde dormí yo. Las tiendas tienen cama y son muy cómodas. Además, el alojamiento tiene unos jardines por los que a menudo se pueden ver diferentes tipos de primates.
– Isunga Lodge. Se encuentra a unos 20 minutos del Parque Nacional Kibale, en un entorno espectacular.
– Kibale River Camp. Una de las opciones más económicas para dormir cerca del bosque de Kibale.
Mi experiencia: la habituation experience en el bosque de Kibale
Desde el P.N. Murchison Falls hasta Kibale
Tras visitar la parte alta de las cataratas Murchison, uno de los puntos imprescindibles del Parque Nacional Murchison Falls, inicié el trayecto hasta el Parque Nacional Kibale. Un recorrido largo, de unas siete u ocho horas de coche.
Conducía mi guía, Twaha, que aprovechó el largo trayecto para contarme cosas de los diferentes pueblos por los que íbamos pasando. Atravesamos muchas zonas rurales, donde gran parte de la población vivía con pocos recursos. La mayoría de ellos se dedican a la agricultura, especialmente al cultivo de café, té y plátanos.
Al mediodía llegamos a Fort Portal, una ciudad famosa por su entorno volcánico, donde hay un gran número de lagos dentro de los cráteres (Crater Lakes). Nos detuvimos a comer en un restaurante local del centro de la ciudad. Desde allí estábamos a tan sólo una hora del bosque de Kibale.
🤞 Seguro de viaje para Uganda
Ante cualquier imprevisto, disponer de un buen seguro de viajes es básico para evitar grandes quebraderos de cabeza. Y más al viajar a un destino como Uganda. Yo siempre viajo asegurado con Heymondo. Si contratas su seguro de viaje a través de este enlace tendrás un 5% de descuento al ser lector de Viajar es Descubrir.
Si quieres profundizar sobre los motivos por los que recomiendo Heymondo, puedes leer el post Heymondo: seguro de viaje (detalles, coberturas y precios).
La llegada al Kibale Forest Camp
Circulando por la carretera que atraviesa el Parque Nacional de Kibale ya pude comprobar la frondosidad de ese bosque. Encontrar a los chimpancés sin la ayuda de un guía sería casi imposible.
Llegué al alojamiento, Kibale Forest Camp, a media tarde. Aún quedaban algunas horas de luz y aproveché para salir a recorrer un sendero de unos cuatro kilómetros que recorrer los jardines de este alojamiento. Aparte de poder ver una gran variedad de pájaros, por allí también se podían ver colobos rojos y colobos negro y blanco.
No tardé demasiado en encontrar un grupo de colobos rojos, que se movían entre las copas de los árboles. No parecían demasiado cómodos con mi presencia, así que no estuve demasiado rato con ellos.
Al llegar al final del camino, me encontré con un grupo de colobos negro y blanco. Estaban comiendo en un enorme árbol, justo en frente de la recepción del alojamiento. Era una de las especies que más ganas tenía que ver. Estuve fotografiándolos hasta la puesta de sol.
La bienvenida antes de la habituation experience
Almuerzo pronto, ya que a las 6:30 tenía que llegar al point center de Kibale, donde revisarían mi permiso antes de empezar la habituation experience. Una vez revisado mi permiso y el de la otra gente que también realizaría esta actividad, en total éramos seis, nos indicaron el ranger del parque que sería el encargado de guiarnos.
Antes de empezar a andar nos explicaron en qué consistiría la experiencia. Podríamos pasar cuatro horas con un grupo de chimpancés en proceso de habituación a los humanos. Un proceso que dura hasta 3 años. El grupo que se nos asignó, llevaba ya unos meses de habituación. Un aprendizaje que se realiza a través de acostumbrarlos a la presencia humana, pero sin ningún tipo de interacción ni alimentación. Poder colaborar en esta fase, es una buena forma de contribuir en la conservación de esta especie. Una vez que los grupos han sido habituados a los humanos, entonces se visitan durante la actividad más habitual: el chimpanzee trekking. Con esta actividad se ingresa la mayoría de dinero, que después se destina en gran parte a la conservación de esta especie y a ayudar a las comunidades locales.
Empezando la búsqueda de los chimpancés en el Parque Nacional Kibale
Poco después de las siete de la mañana, cuando ya empezaba a amanecer, comenzamos a andar. Seguimos la carretera principal, en fila india y detrás de Edison, el ranger que nos acompañaba. Iba armado por si durante el recorrido nos topábamos con algún elefante, búfalo o leopardo. En el interior del bosque los animales son especialmente agresivos, puesto que la falta de visibilidad hace que no puedan anticipar los encuentros.
Cuando hacía una media hora que caminábamos, todavía por la carretera, escuchamos el primer chillido de un chimpancé. Estaban cerca, en el interior del bosque Nuestro ranger se adentró hacia la vegetación, para confirmar si estaban allí. Unos minutos más tarde apareció de nuevo, y nos indicó que le siguiéramos sigilosamente. A partir de ese momento ya empezamos a caminar por el interior de la selva. No seguíamos ningún camino. Así que había que ir apartando las ramas, hojas y raíces. Y no pensar demasiado en la cantidad de insectos y arañas que había por ahí.
El primer encuentro con un chimpancé
Repentinamente Edison se detuvo, y señaló con el dedo una silueta negra. Aún había poca luz, pero no tuve ninguna duda. Era un chimpancé. El primero que veía. Estaba asentado en el suelo, observándonos. Aunque nos quedamos quietos y en silencio, a los pocos segundos se marchó. Era la reacción normal teniendo en cuenta que todavía no estaban acostumbrados a los humanos.
A partir de ese momento ya empezaban a contar las cuatro horas.
Caminando entre los chimpancés del Parque Nacional Kibale
Las siguientes horas fueron muy intensas. No dejamos de movernos. Los gritos de los chimpancés resonaban en el interior de la selva. Era estremecedor. En función del origen de los sonidos y el tipo de chillido, el ranger iba escogiendo el mejor itinerario para ir encontrando nuevos ejemplares del grupo, que según lo que habían podido estudiar tenía unos 70 individuos.
Las observaciones por lo general fueron bastante cortas. Cuando veíamos a algún chimpancé, no solía permanecer quieto demasiados segundos antes de marcharse. En estos casos, nunca seguíamos este ejemplar, sino que nos alejábamos y buscábamos otro. En algunas ocasiones, algún chimpancé toleró mejor nuestra presencia, y nos estuvo mirando durante algunos minutos.
También pude ver bastante chimpancés arriba de los árboles del Parque Nacional Kibale. Moviéndose con una agilidad fascinante. Algunos estaban quietos, comiendo tranquilamente.
Justo cuando hizo cuatro horas desde que habíamos visto al primer chimpancé, nos avisaron. Teníamos que irnos.
Yo no tenía ni idea de dónde estábamos. Estaba completamente desorientado. Por suerte, el ranger lo tenía muy claro. Y no tardó demasiado en encontrar un camino que nos llevaría hasta fuera del bosque de Kibale.
En total caminé más de doce kilómetros por la tupida selva. La mayoría de ellos sin seguir ningún camino. Fue una de las experiencias de naturaleza más mágicas que he vivido. Ver chimpancés en ese entorno, mientras resonaban sus gritos entre las copas de los árboles, fue inolvidable.
(Este post corresponde a la tarde del cuarto día y al quinto día del viaje a Uganda)
Organiza tu viaje a Uganda
🦍 Encuentra los mejores viajes y safaris a Uganda con agencia local aquí.
✈️ Las mejores ofertas de vuelos a Uganda aquí.
🏨 Los mejores precios de alojamientos en Uganda aquí.
🚑 Contrata tu seguro de viaje con un 5 % de descuento aquí.
💳 La mejor tarjeta para pagar (sin comisiones) y sacar dinero en el extranjero aquí.
💵 La mejor forma de hacer transferencias al extranjero aquí.