Recordar Kenia. Las infinitas planicies de la sabana. Las coloridas puestas de sol. Las profundas miradas de los leones. Las tiernas familias de elefantes. Cualquier memoria es motivo para querer volver. Por querer volver a sentir las emociones de un safari. Incertidumbre. Expectativa. Fascinación.
Este verano hizo diez años de nuestro viaje a Kenia. El impacto visual de adentrarnos por los inmensos parques nacionales y de observar directamente a los ojos a la fauna salvaje fue brutal. Y aunque íbamos con cámaras muy sencillas, no dejamos de pulsar el obturador. Impresionados por la belleza de lo que veíamos. Intentando inmortalizar las preciosas postales de la naturaleza keniana, que se nos ofrecían día tras día.
Nuestro viaje a Kenia en 10 postales (y algunas fotografías más)
1.Los primeros elefantes
Tras varios problemas con los vuelos, que hicieron que llegáramos un día más tarde de lo que teníamos previsto, nos adentramos en la salvaje Kenia casi sin darnos cuenta. Antes de entrar en el Parque Nacional Aberdares, paramos en un hotel a esperar el coche en el que nos teníamos que incorporar. Allí fuimos plenamente conscientes de donde estábamos. Ante nosotros, unas ventanas enormes nos ofrecían una espectacular visión de una balsa de agua con una multitud de elefantes salvajes paseando por allí.
2.El Parque Nacional Aberdares
El Parque Nacional Aberdares tiene una vegetación tan densa, que es imposible hacer un safari en 4×4. Únicamente hay algunos caminos trazados, que conducen a los famosos hoteles situados en el corazón del parque. Estos hoteles están situados delante de balsas de agua, que son el punto de reunión de la mayoría de fauna del parque. Así que, sólo hay que coger un buen sitio y contemplar el espectáculo de la naturaleza.
Después de un emocionante trayecto, llegamos al hotel. Durante la tarde elefantes, búfalos, antílopes, ciervos y hienas se acercaron a beber agua. Los teníamos muy cerca. Sólo un cristal nos separaba de ellos. La emoción de contemplar estos enormes mamíferos en su hábitat fue mágica. Inolvidable.
Cuando anocheció el espectáculo no terminó, pues durante la noche nos avisaban de las visitas de los animales. Más elefantes, búfalos y un rinoceronte fueron los protagonistas.
3.Las tranquilas cebras del Parque Nacional del Lago Nakuru
En el Parque Nacional del Lago Nakuru hicimos allí el primer safari en 4×4. Mientras atravesábamos infinitas planicies muy verdosas, vimos los primeros grupos de cebras y de ñus. Alucinamos con la cantidad de animales que nos encontrábamos y con la proximidad con que lo hacíamos. También tuvimos la oportunidad de ver rinocerontes y las primeras jirafas del viaje.
Era nuestro primer día de safari auténtico y estábamos cautivados con la experiencia.
4. La inmensidad del Nakuru Lake
La visita al Parque Nacional del Lago Nakuru la completamos con la visita al símbolo del parque: el Lago Nakuru, el más famoso de los lagos del Rift keniano. Caminando entre un embarrado terreno, nos pudimos acercar a sus aguas y los miles de flamencos que viven. Una panorámica incomparable que completamos visitando una familia de babuinos que se encontraba muy cerca del lago.
5.La primera família de leones
Después de un largo trayecto en coche por las lentas carreteras de Kenia, llegamos al Parque Nacional Masai Mara. El parque nacional por excelencia del país. Donde los safaris son formidables.
Los cálidos colores de la sabana inundaban el territorio inacabable que se nos presentaba. Estábamos ansiosas para adentrarnos en ella. Aparte de poder ver más jirafas, elefantes y rinocerontes, la entrada en el Masai Mara significaba que, si todo iba bien, podríamos ver leones. Y, con un poco de suerte, también tendríamos la posibilidad de observar los elegantes guepardos.
No hacía demasiado que estábamos en el parque, cuando descubrimos una familia de leones descansando bajo unos árboles. Después de tantos y tantos documentales, poder ver en primera persona un grupo de leones en la sabana fue formidable. Eran los primeros felinos de nuestro safari, pero no serían los únicos …
6.Les elegantes jirafas del Masai Mara
Enormes jirafas caminaron muy cerca de nuestro coche mientras circulábamos por los caminos del Masai Mara. La cantidad de animales que podíamos ver casi sin movernos era brutal.
7. Las coloridas puestas de sol
Aunque los animales salvajes son los grandes protagonistas de un safari en África, los paisajes de la sabana nos dejaron impresionados. Sobre todo durante las puestas de sol. Momentos mágicos, de colores intensos que se fusionaban con el paisaje para pintar unas vistas aún más cautivadoras.
Los días acababan esplendorosos, recordándonos las mágicas jornadas, y anunciando de que aún quedaba mucho por ver …
8. La impactante escena de las leonas cazando
El segundo día de safari por el Masai Mara lo iniciamos pronto. Las primeras horas del día son los momentos perfectos para salir a buscar animales. El día no podía empezar mejor: mientras el sol acababa de salir vimos más jirafas, un chacal y un grupo de buitres aprovechando la carroña de un ñu.
Pero el momento culminante llegó con los leones. Un grupo de leonas avanzaban camuflados entre las hierbas hacia un grupo de ñus. El ataque era inminente. Esperamos allí, pacientemente, y en cuestión de segundos vimos como los felinos se lanzaban sobre un ñu solitario. Una escena impresionante, y tremendamente dura. Una muestra de la dureza del mundo salvaje.
Sin duda, este fue el momento más impactante de nuestro safari. Mil sensaciones recorrieron nuestro cuerpo mientras sufríamos con la agonía del ñu, y nos mostraba la auténtica realidad de la naturaleza. Una realidad que sólo se puede vivir en primera persona.
9. Viendo un grupo de guepardos
La última jornada por el Masai Mara, no dejó de sorprendernos. Pudimos ver muchísimos leones, desde grupos de leonas con cachorros hasta machos solitarios. Pero soñábamos con ver el guepardo, el mamífero terrestre más rápido del mundo.
La fortuna de nuevo nos favoreció. Tres elegantes guepardos aparecieron ante nosotros. ¡Brutal!
10. El Mara River
No podíamos marcharnos del Masai Mara sin visitar el famoso río Mara. Este río, que cruza el Serengeti y el Masai Mara, se encuentra dentro de la ruta de la migración de los ungulados. Aquí se producen las famosas escenas de los documentales, donde miles de ñus y cebras cruzan el curso del agua al mismo tiempo, en una estampida de animales evitando ser cazados por los cocodrilos e hipopótamos que habitan en las aguas del río.
A mediados de agosto, aún no ha llegado ese momento. Pero acercándonos al río pudimos ver un gran número de cocodrilos e hipopótamos.
Información práctica para un safari en Kenia
Este safari lo realizamos en 2006. Aunque hacer un safari por libre es posible en muchos países de África, es una opción poco recomendable (desde mi punto de vista). Los guías conocen el terreno y se comunican entre ellos, por lo que las posibilidades de ver fauna son mucho más elevadas.
Nosotros reservamos toda la ruta desde casa a través de una agencia de viajes española: Iberia Viajes. Ahora bien, si lo volviéramos a hacer, seguramente optaríamos por contactar con alguna empresa local, ya que normalmente hay mucha más variedad a la hora de elegir el tipo de safari y suele salir un poco más barato. Esta página web es ideal para comparar las agencias locales que ofrecen safaris en África.